La campana extractora es un elemento fundamental en la cocina, ya que se encarga de eliminar los humos y olores generados al cocinar. Sin embargo, con el uso continuo, es común que se acumule grasa en su interior, lo que puede afectar su eficacia y causar malos olores. Por ello, es importante realizar una limpieza periódica de la campana extractora para mantenerla en óptimas condiciones y prolongar su vida útil.
[ama 1kw1=»Cómo limpiar la campana extractora y quitar la grasa»]
¿Por qué es importante limpiar la campana extractora?
La acumulación de grasa en la campana extractora no solo puede afectar su funcionamiento, sino que también representa un riesgo de incendio. La grasa atrapada en los filtros y conductos de la campana puede inflamarse con facilidad si se expone a altas temperaturas, poniendo en peligro la seguridad de la cocina y de quienes la utilizan.
Además, una campana extractora sucia no funcionará de manera eficiente, lo que significa que no eliminará adecuadamente los humos y olores generados al cocinar. Esto puede provocar que el ambiente de la cocina se vuelva más pesado y desagradable, afectando la experiencia de cocinar y la calidad de la comida.
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¿Cómo limpiar la campana extractora?
Para limpiar la campana extractora y quitar la grasa acumulada, sigue estos sencillos pasos:
- Desconecta la campana extractora de la corriente eléctrica para evitar accidentes.
- Retira los filtros de la campana y sumérgelos en agua caliente con detergente desengrasante. Deja que se empapen durante unos minutos para aflojar la grasa.
- Mientras los filtros se están remojando, limpia el exterior de la campana con un paño húmedo y un poco de detergente. Presta especial atención a las zonas más grasientas.
- Una vez que los filtros hayan estado en remojo el tiempo suficiente, frótalos con un cepillo de cerdas firmes para eliminar la grasa adherida. Enjuágalos con agua caliente y déjalos secar completamente antes de volver a colocarlos en la campana.
- Por último, revisa los conductos de la campana y límpialos con un paño húmedo o un cepillo si es necesario. Asegúrate de que no haya obstrucciones que puedan afectar el flujo de aire.
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Realizar esta limpieza al menos una vez al mes ayudará a mantener tu campana extractora en óptimas condiciones y a prevenir problemas futuros. Recuerda que la limpieza regular no solo mejora el funcionamiento de la campana, sino que también contribuye a mantener un ambiente limpio y seguro en la cocina.
Con estos sencillos pasos, podrás mantener tu campana extractora libre de grasa y disfrutar de una cocina más limpia y segura. ¡No descuides la limpieza de este importante electrodoméstico y disfruta de cocinar en un ambiente saludable!